Además de tener precaución con el uso del correo electrónico y el acceso a los perfiles de redes sociales, ¿qué otras cosas pueden poner en riesgo nuestra seguridad y privacidad si hacemos uso de dispositivos públicos?
a) No realizar ninguna acción en la que intervenga datos bancarios como sería comprar en una tienda online o acceder al servicio de banca electrónica. Este tipo de información es extremadamente sensible y crítica como para hacer uso de ella desde un dispositivo y conexión desconocida.
b) No introducir en ninguna web datos personales sensibles como puede ser el Documento Nacional de Identidad (DNI) o información sobre el estado de salud.
c) No cerrar la sesión cuando accedemos a un servicio y no guardar las credenciales de acceso en el navegador. Si la sesión queda abierta o las credenciales guardadas en el navegador, cualquiera que acceda al equipo después de nosotros tendrá la posibilidad de acceder a ella y utilizarla sin nuestro consentimiento. Para evitar esto podemos utilizar las funcionalidades de navegación anónima que disponen los navegadores.
- Navegación privada en Firefox
- Navegación de Incognito en Chrome
- Navegación InPrivate en Internet Explorer
- Navegación InPrivate en Edge
- Navegación privada en Safari
Para más información sobre esta útil funcionalidad que nos ofrecen los navegadores, se puede consultar el artículo del blog “¿Ordenador público? Usa la opción del navegador navegación privada”.
d) No usar teclados virtuales, cuando es posible, para introducir credenciales de acceso. Este tipo de programa emulan las funciones de un teclado convencional, se muestra en la pantalla un teclado en el que se selecciona cada carácter por medio del ratón. Su uso está muy extendido en la banca online. Este tipo de software evita en gran medida que algunas clases de malware conocidos como keyloggers capturen las pulsaciones que hacemos con el teclado convencional.
e) Conectar al equipo un USB o un disco duro externo. Existen algunos malware que capturan toda la información contenida en la memoria externa o que se alojan en la misma hasta que se ejecuta en otro equipo para posteriormente infectarlo.
f) Descuidar el equipo cuando lo estemos utilizando. Aunque parezca algo inverosímil un simple descuido puede ser suficiente para que un ciberdelincuente robe información personal nuestra.
El uso de equipos públicos en determinadas situaciones puede sernos de utilidad, pero debemos ser precavidos con la información que facilitamos evitando, siempre que sea posible, introducir cualquier tipo de información personal ya que nunca sabemos cuan seguro es el equipo. Utilizaremos un dispositivo en el que tengamos confianza como un smartphone con la conexión de datos móvil activada para realizar trámites importantes: acceder a la banca online, realizar compras, acceso al correo, etc.
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