Conducir el cambio a partir de un programa corporativo

Conducir el cambio a partir de programas corporativos

Las direcciones ejecutivas de las grandes empresas están introduciendo cada vez más programas como forma de fomentar la innovación estratégica.

Es importante adecuar el diseño del programa corporativo con los resultados deseados, según los objetivos de la compañía: impulsar el rendimiento, mejorar los modelos empresariales o establecer nuevas direcciones de crecimiento.

¿Y tú? ¿Tienes claro cuál es el programa corporativo que necesitas?

Los programas corporativos actúan como vehículos clave para la renovación. Las direcciones de las compañías utilizan estos programas como herramienta para comunicarse internamente con sus empleados y comunicarse externamente con analistas y accionistas. En estos programas también se planea introducir cambios importantes en sus organizaciones para impulsar las áreas clave de sus compañías.

Se ha comprobado que las direcciones ejecutivas de las compañías utilizan tres diseños diferentes para los programas corporativos: la división de metas, el equipo de tareas y la superposición. ¿Qué estrategia utiliza cada programa?

División de metas. Es idóneo aplicar el enfoque de división de metas cuando el programa corporativo esta enfocado a la optimización de actividades.

Se trata del enfoque más sencillo, el modo de aplicación se basa en la división de los objetivos generales (por parte de la dirección de la compañía) y se les asigna un programa de metas específicas que son designadas a cada gerente de la unidad de negocios. Aunque permanecen en sus roles anteriores, estos gerentes dedican parte de su tiempo a contribuir a el programa tratando de alcanzar los objetivos que se le han asignado.

Fuerza de trabajo. El contexto adecuado para aplicar este programa se considera cuando la dirección ejecutiva conduce un número pequeño de temas que son distintos pero adyacentes a la estrategia existente al marco de referencia. En esta opción la dirección ejecutiva de la organización crea un grupo de trabajo (normalmente llamado “oficina de programas”) en los que hay especialistas altamente cualificados. Este equipo será el responsable de realizar los objetivos del programa corporativo de la compañía.

El equipo de tareas aporta habilidades especializadas a la línea de la organización que no estarían disponibles sin este soporte corporativo. Por otro lado, sirve como los “ojos” de la dirección ejecutiva monitorizando el proceso y avisándole de cualquier desviación del rendimiento.  Sin embargo, la dirección ejecutiva necesita la participación de la organización para integrar estrechamente el programa corporativo con las operaciones o tareas que se llevan a cabo.

Superposición. El programa de superposición aparece especialmente en dos circunstancias: cuando el objetivo es implementar un cambio radical o cuando el objetivo es fomentar la integración entre unidades en organizaciones muy divididas.

Se empieza creando un equipo de tareas o un programa de oficina. El programa de oficina puede actuar a través de las existentes estructuras organizativas y tiene la orden de participar plenamente en la organización en general i ignorar la gestión de selección de temas. Los objetivos de estos programas corporativos se persiguen o se pretenden alcanzar a través del contacto total entre la oficina del programa y la línea de la organización.

Sin embargo, se tiene que tener en cuenta que, para todas las organizaciones, el primer paso y más importante a dar para empezar a implantar un programa corporativo se trata en decidir cuál de los tres programas puede desafiar sus objetivos y garantizar su resultado.

Innovación

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Líder, ¿cómo encauzar una conversación difícil?

Líder, ¿cómo encauzar una conversación difícil?

A pesar de nuestras mejores intenciones, las conversaciones con frecuencia pueden virar hacia un territorio difícil, produciendo frustración, resentimiento y una pérdida de tiempo y esfuerzo.

La inflexibilidad conversacional puede hacer casi imposible liderar el cambio. En lugar de motivar y facilitar el progreso, exaspera y agota a su equipo. Para tener conversaciones más efectivas, es necesario agregar más herramientas de conversación y aprender a usarlas con habilidad.

A continuación, se muestran ocho estrategias que se pueden utilizar para encarrilar las conversaciones y luego avanzar.

    1. Cambia la relación de “oposición” a “asociación”. En medio de una conversación difícil, es fácil ver a tu compañero de conversación como tu oponente. Intentar reposicionarse, tanto mental como físicamente, para estar al lado de la otra persona, de modo que se centre en el mismo problema es clave. En lugar de acercarse a las conversaciones como un asalto frontal a un edificio vigilado, es mejor llamar cortésmente a la puerta del castillo, donde es más probable ser bienvenido.

    1. Replantea tu propósito de “convencer” a “aprender”. Las conversaciones a menudo se desvían cuando intentamos que alguien adopte nuestra visión o enfoque. Cuando nuestro propósito es hacer que otra persona vea las cosas a nuestra manera, es probable que se resistan, y la discusión bloquea el aprendizaje y envía las conversaciones a una zanja. No importa lo bien hablados y lógicos que podamos ser, no podemos entender y resolver el problema sin explorar cómo lo ve la otra persona. Cada vez que usamos la persuasión como su objetivo conversacional, se vuelve ineficaz. El cambio consciente a un modo de aprendizaje nos ayuda a obtener la perspectiva que necesitamos para ser creativos, colaborar y avanzar la conversación.

    1. Verbaliza tu intención. La transparencia ayuda a facilitar conversaciones productivas. Comparte tu propósito y lo que esperas lograr con tu interlocutor. Pregunta qué les gustaría obtener de la conversación. Se explícito, no solo sobre el tema y el resultado deseado de la conversación, sino también sobre el proceso.

    1. Evita suposiciones. Pregúntale a alguien que acaba de tener una conversación difícil qué salió mal, y es probable que te describan lo que creen que estaba en la mente de la otra persona: «Está totalmente concentrado en su propia carrera y no le importa si el equipo tiene éxito», por ejemplo. Las suposiciones que hacemos sobre las intenciones de otra persona generalmente revelan más sobre nosotros mismos que sobre lo que sucede en su mente. Hacer suposiciones también limita nuestra efectividad porque nos impide entender completamente la situación y reduce el rango de soluciones que consideramos.

    1. Examina la perspectiva del otro con franqueza y curiosidad. Para comprender la perspectiva de tu compañero de conversación, es necesario desactivar la actitud defensiva y activar la curiosidad. Evita hacer preguntas importantes y cerradas y haz preguntas abiertas.

    1. Reconoce tu parte. Es muy fácil identificar lo que la otra persona ha hecho mal, pero es mucho más difícil identificar la propia contribución al problema. Pero reconocer tu parte demuestra cómo asumir la responsabilidad y alienta a otros a hacer lo mismo.

    1. Aprende tus A-BCDs (E-CDDm). Se han identificado cuatro comportamientos de comunicación que descarrilan las conversaciones de manera consistente, conocidos como “los cuatro jinetes del apocalipsis». Es importante aprender a: Evitar la Culpa, el Desprecio, estar a la Defensiva y ser un “Muro”. La actitud defensiva aparece cuando negamos la responsabilidad de nuestra propia contribución a la conversación difícil. El “muro de piedra” puede tomar varias formas, incluida la pasividad, evitar un tema determinado, negarse a participar o contribuir a la discusión, o retener información relevante. Si te involucras en alguno de estos comportamientos, es importante volver a concentrarse en lo que se está tratando de lograr y recordar que examinar los problemas difíciles con franqueza y curiosidad, aunque a veces sea incómodo, es clave para tener conversaciones productivas. Discute los cuatro comportamientos con su equipo y acepta que os responsabilizarán mutuamente por evitarlos.

  1. Busca información para resolver problemas. Los seres humanos estamos motivados para preservar y proteger nuestra autoestima, por lo que la retroalimentación puede ser difícil de recibir. Tendemos a rechazar la información que amenaza nuestra identidad y, por lo tanto, no aprendemos de ella.

La práctica de cualquiera de estas técnicas aumentará tu capacidad para tener conversaciones productivas sobre incluso los problemas más difíciles o polémicos. El objetivo es incorporar las ocho en tu repertorio, aumentar tu agilidad conversacional y mejorar tu capacidad para influir en sus colegas.

Habilidades

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La neurociencia para mejorar tu liderazgo

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LOS PEQUEÑOS CAMBIOS EN TU LIDERAZGO TE PERMITIRÁN DINAMIZAR MEJOR A TU EQUIPO

Los recientes estudios científicos basados en neurociencia vienen explicados para el uso en organizaciones en el  exitoso libro de How to Have a Good Day: Harness the Power of Behavioral Science to Transform Your Working de Caroline Webb.La autora, que lleva el departamento de liderazgo de la prestigiosa consultora de recursos humanos Mckinsey, defiende que simples ajustes en la comunicación y el comportamiento de los líderes pueden crear un ambiente potencialmente más productivo para cualquier equipo. No siempre resulta fácil convertir a tus trabajadores más próximos en personas más creativas, adaptables o colaborativas por eso partiremos de una experiencia real para explicar los pequeños cambios de mejora. En este artículo, describiré el caso de un líder llamado Antony que sabía lo suficiente sobre la ciencia del cerebro para incentivar cambios de comportamiento positivos en su organización:

ANTONY Y EL DOBLE SISTEMA CEREBRAL

Actualmente Antony, dirige una exitosa consultora de tecnología fundada el año 2011 que continúa creciendo a un ritmo exponencial. Pero antes de iniciar la empresa, trabajaba para una gran agencia con una «cultura tóxica«. 

¿Qué entendemos por una cultura tóxica? ¿A qué se debe el malestar en las organizaciones?

La cultura tóxica surge de tres factores: la falta de liderazgo y de valores de la cúpula directiva que improvisa y trasmite incoherencia al decir una cosa y acabar haciendo otra; la gestión tóxica y nociva de los mandos intermedios mediante la manipulación que desencadena la actitud victimista de los trabajadores (al empleado se le exige mucho y no se lo recompensa).Es una rueda destructiva que se nutre de estrés y malhumor impregnando de manera global la salud organizacional.

Para su nueva compañía, Antony, quería forjar una cultura donde las personas pudieran fortalecer su lado más innovador y pudiera emerger un ambiente de colaboración emocionalmente equilibrado. Los dos cofundadores se encargaron de poner en marcha la compañía cuidando de los detalles para que todo saliera según su filosofía, pero Antony sabía que para conseguir el máximo rendimiento eran necesarias medidas tangibles. Sobretodo las que tienen en cuenta el doble sistema cerebral, entendida como la actividad del cerebro que se divide en dos sistemas cerebrales complementarios uno de procesamiento controlado y otro automático:

• El sistema controlado es responsable de las funciones sofisticadas, conscientes tales como el razonamiento, el autocontrol, y la visión de futuro. Permite hacer una sola tarea concentrando en ella toda la atención por ejemplo escribir un informe complejo por primera vez.

• El sistema automático  rebaja la carga de la atención mediante la automatización de la mayor parte de acciones que hacemos día a día por ejemplo respirar o cambiar de marcha cuando llevas años de experiencia conduciendo.

Liderazgo

El problema principal al abusar del sistema automático es que, al poder realizar distintas tareas, cada vez que iniciamos una, se crea una nueva interrupción que da lugar a descuidos creando un clima de confusión. El cerebro, para ser capaz de hacer dos tareas, debe secuenciar y priorizar su realización. Entonces, cuando pretendes llevar a cabo dos ejercicios a la vez (como mirar el correo electrónico y atender una visita), la mente ordena su realización estableciendo un orden: primero una tarea y después la otra, centrando distintos grados de atención en fases separadas y diferentes. De hecho, Antony planteó en una reunión la cuestión de la sobrecarga de informativa y propuso evitar el multitasking porque las investigaciones demuestran que con el multitasking las personas cometen de dos a cuatro veces más errores cuando están sometidos a continuas interrupciones y distracciones y además se sienten más estresadas.

A la vez que el sistema automático puede entorpecer el rendimiento diario, el sistema controlado llevado al extremo también puede convertirse en un obstáculo para el buen funcionamiento de la organización. Por ejemplo, en un estudio se recogía la situación siguiente: el comité directivo de unos hospitales estaba tratando de fomentar el uso de desinfectante para las manosy encontraron que las tasas de cumplimiento decayeron cuando las personas trabajaban largas horas sin descanso.

Retomando el caso de Antony, observó que las medidas acordadas para hacer más descansos no estaban dando resultado. Cuando él y sus cofundadores crearon la «reunión del lunes» para todo el personal y así discutir la forma en que estaban trabajando juntos como una empresa, salió a la superficie que las presiones por cumplir con propósito de aliviar la recarga iban en aumento. Las tensiones se manifestaban con tal intensidad que estaban amenazando el compromiso del equipo. Por consiguiente, era necesaria tomar nuevas decisiones al respecto de forma urgente, y establecieron novedades en el comportamiento de la empresa: una fue alentar a los demás para ir a comer y otra programar descansos entre reuniones. Lo más importante que aprendió Antony es que como líder tuvo que asumir la responsabilidad de su comportamiento y dar a conocer la conducta ejemplar: Además de emprender nuevas costumbres como reconocer el mérito de aquellos comportamientos que siguieran las nuevas directrices, adoptó el siguiente pensamiento de ayuda: «abandono por ejemplo» de esa manera conseguía parar de focalizar en una tarea y permitirse desconectar unos minutos. Entonces, la gente se empezó a animar a hacer más descansos porque entendió que no era una actitud penalizada y dejó de sentirse culpable al respecto.

Liderazgo

CAROLINE WEBB Y EL DOBLE SISTEMA CEREBRAL

A menudo el uso automatizado de nuestro cerebro te puede condicionar hasta el punto de limitar tus habilidades directivas, entorpecer reuniones y frenar el crecimiento de las personas a tu mando.

Liderazgo

Recordemos que el caso de Antony ejemplificaba como un líder que se decantó por utilizar los principios del doble sistema cerebral había conseguido que los integrantes de su empresa usaran de forma correcta su atención y el sistema cerebral que se ajustaba más a la tarea que se proponían hacer. También a tomar descansos con más frecuencia y otros pequeños cambios para optimizar el funcionamiento grupal.

Caroline Webb, nos advertía de los peligros del uso del sistema automático como saboteador de la actitud del líder, y compartía una fórmula para detectar la actitud negativa y un truco de observación para acceder de forma rápida a una visión constructiva y positiva.

En resumen, cuando los líderes de un equipo escogen la neurociencia como método de mejora se produce un aumento considerable en la productividad, la innovación y la moral. Y se consigue renovar hábitos mediante el uso consciente de ejercicios basados en la naturaleza de nuestra mente.

Para poder hacer frente a los cambios de la Era Digital y sacar el mayor beneficio de ellos, se necesitan lideres capaces de llevar adelante los procesos de transformación y cambio de las organizaciones.

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Invertir en talento digital

Invertir en talento digital

La autoconfianza es mucho mayor en aquellas organizaciones que tienen suficiente talento digital como para mantener a los empleados en un aprendizaje continuo y conseguir que estén muy motivados para que continúen trabajando en la empresa. Para esto, es imprescindible que las organizaciones busquen la participación de los empleados en plataformas y comunidades virtuales donde puedan recibir formación continuada y aprendiendo habilidades de otros compañeros o, incluso, de otras compañías.

Lejos de propiciar que los empleados hagan su trabajo de manera secreta, las organizaciones con autoconfianza instan a sus trabajadores a difundir su trabajo en comunidades y plataformas de conocimiento compartido con expertos de otras organizaciones. Esto, a la vez, es una manera de buscar talento nuevo sobre las nuevas tecnologías y que sus empleados aprendan de otras empresas con las que colaboren.

En contra, las organizaciones que no son capaces de generar talento ni de mantenerlo, fomentan la fuga de empleados a otras compañías. Investigaciones recientes apuntan, además, que los empleados también buscan organizaciones con alto talento digital con las que trabajar. De hecho, la vida media de un empleado en una organización ha ido decreciendo con los años, lo cual reafirma que es muy importante buscar estrategias para retener el talento.

También, por lo que se refiere al reclutamiento de personal, cada vez son más importantes los procesos de búsqueda digital, por lo que es fundamental para los candidatos poder demostrar en la red su bagaje en el ámbito digital. Para las empresas esto también es positivo, puesto que son más eficientes en los procesos de reclutamiento y, además, pueden valorar el nivel de competencia digital de sus empleados potenciales.

Finalmente, se concluye que es necesario un equilibro entre los empleados que se van porque no encajan con la cultura empresarial de la organización y los que vienen precisamente porque creen en ella e incluso se ven capaces de producir cambios positivos para la misma. Esta es la mejor manera de crecer como organización.

  • EL CASO CIGNA

Cigna es una empresa de servicios de salud que ha hecho del aprendizaje una necesidad, no sólo para sus líderes y empleados sino también para sus profesionales médicos o consumidores.

De hecho, los programas de educación formal dentro de la empresa han favorecido que los profesionales se formen y, consecuentemente, tengan más posibilidades de ser promocionados. Esta manera de entender la formación no es casual, sino que forma parte de un plan estratégico para mantener el talento dentro de la empresa.

A nivel digital, esta organización también ha lanzado una plataforma de formación online donde los profesionales pueden adquirir nuevas habilidades a través del conocimiento compartido que sólo las comunidades virtuales pueden brindar.

Transformación Digital

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Por qué tu Empresa necesita más Colaboración

Por qué tu Empresa necesita más Colaboración

Investigaciones han demostrado que las compañías necesitan un enfoque de colaboración a través de la transformación digital para poder establecer una ventaja competitiva en el mercado. Tenemos claros los grandes beneficios que se pueden obtener a través de la cooperación, sin embargo, son muchas las compañías que tienen que convertirlo en una prioridad.  Y tú, ¿consideras la colaboración como un objetivo principal en tu organización?

Menos de la mitad de los participantes en una encuesta digital de negocios administrada en 2016, nombraron de forma relevante que sus organizaciones estaban incrementando el número de proyectos de equipos multifuncionales en sus organizaciones. Esto significa que hay muchas empresas que necesitan hacer este cambio para obtener mejores resultados.

Estas trasformaciones han originado, en estas compañías, un enfoque hacia la cooperación y la colaboración, llegando incluso a difuminar los límites organizacionales tradicionales.

La colaboración multifuncional

Según un informe reciente de investigación basado en una encuesta global de más de 3.500 gerentes y ejecutivos sobre tendencias de negocios digitales, las empresas que implementan tecnologías y capacidades digitales con éxito para mejorar los procesos fomentan el talento en toda la organización, e impulsan nuevos modelos de negocio generadores de valor, son mucho más propensas a realizar equipos de trabajo multifuncional, es decir equipos de trabajo de colaboración.

Más del 70% de estas organizaciones usan equipos multifuncionales para organizar el trabajo y las tareas, implementando prioridades en el negocio digital.  Las empresas digitalmente avanzadas, reconocen y premian los equipos que trabajan a partir de la cooperación y de forma multifuncional.

Cada vez más, los procesos o tareas se están volviendo más integrados, de manera que pensar en una función o tarea aislada es más difícil.

La gestión de datos: una nueva colaboración con los clientes

En el ámbito del Internet de las cosas (IoT), aquel ámbito en que los objetos con dispositivos informáticos permiten conectarse entre sí e intercambiar información y datos entre ellos, se requiere la búsqueda de estrategias de colaboración de valor, ya que se caracteriza por una alta frecuencia de interacción con los clientes a través del intercambio de datos de los dispositivos.

Este intercambio de datos a través de las fronteras de la organización profundiza las relaciones existentes entre las organizaciones y fomenta nuevas cooperaciones con los clientes.

Adaptarse a una mayor colaboración

Las empresas digitalmente avanzadas son más cooperativas porque persiguen objetivos corporativos que dependen del uso eficaz de la tecnología, así como también depende del establecimiento de colaboraciones efectivas.

Mantener (en lugar de sólo construir) una cultura digital que apoye la cooperación puede ser uno de los desafíos más exigentes ya que la colaboración necesita unas características específicas en las personas que conforman esta cultura como la empatía, la capacidad de resolución de problemas, la curiosidad o la capacidad de adaptación.

Colaboración

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