Innovación digital: más que experimentación

INNOVACIÓN DIGITAL: MÁS QUE EXPERIMENTACIÓN

 

En la actualidad, la innovación digital de las tecnologías de las organizaciones se está convirtiendo en una prioridad, en consecuencia, la mayoría de las organizaciones y empresas están atravesando este proceso de innovación.

El alcance de la experimentación para esta mejora, sin embargo, no rinde siempre con resultados para impactar al nivel de la empresa. Así, entonces, las empresas a menudo se centran en sus habilidades o recursos para aumentar o reforzar esta experimentación digital que se requiere para alcanzar la innovación digital.

Gran parte de las empresas que tienen laboratorios de innovación digital se encuentran con el inconveniente de que no pueden ser utilizados como pretenderían por falta de recursos, entre otros motivos. Aquellas organizaciones que logran tener éxito en algunas experimentaciones se convierten en empresas capaces de enfrentarse a desafíos muy grandes.

Se han definido dos variedades de experimentos. Por un lado, están aquellos con una pequeña innovación, referida a aquellos que solo requieren esfuerzo experimental. Y, por otro lado, están aquellos con una gran innovación, que cuentan, además, con los esfuerzos por parte de toda la compañía.

Las organizaciones consideradas digitalmente maduras, con una pequeña innovación conducen hacia innovaciones grandes que darán lugar a experimentaciones extensos. En otras palabras, aquellas compañías digitalmente maduras, han demostrado que es 2,5 veces más probable que tengan iniciativa para iniciar experimentación en innovación digital tanto pequeños experimentos como grandes iniciativas a nivel empresarial.

A pesar de los recursos materiales que se requieren, se ha demostrado que aquellas organizaciones tolerantes a la hora de cometer errores y con habilidad para aprender de ellos permiten redirigir estas investigaciones y aumentar las probabilidades de éxito.

Financiación de la innovación: Un desafío clave dentro este campo es poder encontrar la financiación necesaria para poder promover investigación en iniciativas digitales mientras se atiende a los negocios ya existentes.

Para lograr los recursos económicos necesarios muchas compañías cuentan con la financiación monetaria de alguno de los gerentes; mientras que otras empresas están consiguiendo inversiones de capital a través de su perspicacia y disciplina, este es el caso de algunas compañías que han logrado autofinanciarse. Se considera que encontrar formas para poder crecer y tener la oportunidad de autofinanciarse es crucial, ya que así las oportunidades digitales solo dependen ellos mismos.

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Invertir en talento digital

Invertir en talento digital

La autoconfianza es mucho mayor en aquellas organizaciones que tienen suficiente talento digital como para mantener a los empleados en un aprendizaje continuo y conseguir que estén muy motivados para que continúen trabajando en la empresa. Para esto, es imprescindible que las organizaciones busquen la participación de los empleados en plataformas y comunidades virtuales donde puedan recibir formación continuada y aprendiendo habilidades de otros compañeros o, incluso, de otras compañías.

Lejos de propiciar que los empleados hagan su trabajo de manera secreta, las organizaciones con autoconfianza instan a sus trabajadores a difundir su trabajo en comunidades y plataformas de conocimiento compartido con expertos de otras organizaciones. Esto, a la vez, es una manera de buscar talento nuevo sobre las nuevas tecnologías y que sus empleados aprendan de otras empresas con las que colaboren.

En contra, las organizaciones que no son capaces de generar talento ni de mantenerlo, fomentan la fuga de empleados a otras compañías. Investigaciones recientes apuntan, además, que los empleados también buscan organizaciones con alto talento digital con las que trabajar. De hecho, la vida media de un empleado en una organización ha ido decreciendo con los años, lo cual reafirma que es muy importante buscar estrategias para retener el talento.

También, por lo que se refiere al reclutamiento de personal, cada vez son más importantes los procesos de búsqueda digital, por lo que es fundamental para los candidatos poder demostrar en la red su bagaje en el ámbito digital. Para las empresas esto también es positivo, puesto que son más eficientes en los procesos de reclutamiento y, además, pueden valorar el nivel de competencia digital de sus empleados potenciales.

Finalmente, se concluye que es necesario un equilibro entre los empleados que se van porque no encajan con la cultura empresarial de la organización y los que vienen precisamente porque creen en ella e incluso se ven capaces de producir cambios positivos para la misma. Esta es la mejor manera de crecer como organización.

  • EL CASO CIGNA

Cigna es una empresa de servicios de salud que ha hecho del aprendizaje una necesidad, no sólo para sus líderes y empleados sino también para sus profesionales médicos o consumidores.

De hecho, los programas de educación formal dentro de la empresa han favorecido que los profesionales se formen y, consecuentemente, tengan más posibilidades de ser promocionados. Esta manera de entender la formación no es casual, sino que forma parte de un plan estratégico para mantener el talento dentro de la empresa.

A nivel digital, esta organización también ha lanzado una plataforma de formación online donde los profesionales pueden adquirir nuevas habilidades a través del conocimiento compartido que sólo las comunidades virtuales pueden brindar.

Transformación Digital

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¿Necesitas motivación en el trabajo? Las nuevas tecnologías pueden ayudarte

¿Necesitas motivación en el trabajo? Las nuevas tecnologías pueden ayudarte

 

Las investigaciones científicas demuestran que dar consejos, en lugar de recibirlos, es una acción clave para la motivación.

La utilización de nuevas tecnologías supone para una empresa, principalmente, una ventaja competitiva a largo plazo. Sin embargo, en realidad, quienes funcionan como agentes clave en la identificación de nuevos mercados son las personas, no la tecnología en sí misma. 

Pero ¿qué ocurre cuando las personas no se encuentran motivadas en la empresa? ¿cómo nos podría ayudar la tecnología?, ¿qué pasa si los empleados desmotivados que siempre piden ayuda están pasando por alto lo que realmente necesitan?

Desde hace tiempo los psicólogos explican que el hecho de que las personas tropiecen siempre con los mismos problemas se debe a que carecen de la motivación necesaria para convertir su conocimiento en acción. Ante esta evidencia, se proponen darle la vuelta a la situación y preguntan: ¿qué pasaría si en lugar de buscar un consejo, le pedimos a la persona desmotivada que aconseje a otro compañero? A pesar de que dar consejos no implica la adquisición de información nueva, se cree que puede traducirse en un aumento de seguridad en aquella persona que lo da. La confianza en las capacidades de uno mismo puede fomentar la motivación y el éxito incluso más que la capacidad de acción en sí misma.

Este método de dar consejos en vez de recibirlos ha demostrado tener, además, una poderosa capacidad de motivación en otros ámbitos. Por ejemplo, en el ámbito financiero, se ha observado que, aproximadamente el 72% de las personas que luchan por ahorrar dinero se sienten más motivadodos después de dar consejo a después de recibir consejos de expertos. Por otro lado, se observó que el 77% de los adultos que tienen dificultades para controlar su ira encuentran que dar consejos sobre el manejo de ésta es más motivador que recibir consejos de psicólogos profesionales en el ámbito. Por último, se determinó que el 72% de los adultos que quieren perder peso también encuentran que dar consejos es más motivador que recibir consejos de nutricionistas experimentados.

El fracaso repetido en la consecución de las propias metas debilita la confianza de la persona y, por diferentes motivos, dar consejos puede restaurar esta falta de confianza. Dar consejos obliga a la persona a realizar una búsqueda sesgada en su memoria. Esta búsqueda es sesgada ya que, para dar consejos a otros, la persona solo tendrá en cuenta aquellos comportamientos del pasado que le resultaron exitosos.

Las personas creen erróneamente que, tanto ellos como los demás, se sentirán más motivados recibiendo consejos que dándolos. Además, suelen atribuir falsamente sus fracasos de autocontrol a la falta de conocimiento, pero, los verdaderos responsables del fracaso son la falta de confianza y, por ende, la falta de motivación.

Así pues, los empleados que luchen por mantenerse motivados en el trabajo deben dar consejos tanto o más de los que reciben. Por ejemplo, si un empleado está experimentando un problema de gestión de tiempo en su puesto de trabajo, este empleado se verá beneficiado si se le pide que asesore a un compañero sobre cómo priorizar sus tareas y administrar su carga de trabajo.

Otra fuente de motivación importante es el medio en el que se trabaja. Si bien los gerentes deben continuar ayudando a los empleados a través de tutorías directas, pueden replantear la conversación y pedir a los empleados que den consejos a los demás sobre los problemas a los que se enfrentan a diario.

El cambio de paradigma al pasar buscar consejos a dar consejos ofrece un potencial motivacional para nuestros empleados.

 

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El arte de gestionar colaboraciones complejas en tu equipo

El arte de gestionar colaboraciones complejas en tu equipo

Los mayores desafíos de la sociedad también suelen ser los más complejos, es por ello por lo que las soluciones no suelen ser tan simples. Tal vez, la única forma de avanzar en nuestros desafíos es reunir a las partes interesadas en un tema determinado para buscar intereses comunes y resolver los puntos de conflicto.

¿Suena sencillo? Aquí te daremos las claves para que lo logres. Cinco lecciones para el éxito:

Reuniendo al grupo

Es normal que, en la conformación de un grupo, cada integrante tenga intereses distintos y personalidades diferentes, esto es lo que marca la particularidad de cada miembro. Pero poder acoplar esto en objetivos comunes y transformarse en un equipo es el gran desafío que debemos afrontar para alcanzar el éxito.

 

Transformar el grupo en equipo

Sin embargo, seleccionar, armar, mantener grupos, no es tarea fácil. Muchas iniciativas han tropezado, han fracasado y han supuesto la disolución del grupo. La determinación de los líderes por hacerlo funcionar es algo clave para esquivar posibles obstáculos y superar el reto que supone.

Para poder lograr esto es necesario que el grupo se conozca, entienda y mantenga los objetivos claros, sabiendo que todos forman parte de algo mayor, ¿el todo es más que la suma de sus partes? Podríamos plantear esto para entender que cada miembro aportará un plus a la organización y, si logran una cohesión y trabajo en equipo, más allá de las adversidades que afronten, seguirán trabajando juntos para salir adelante.

 

Mantener clara la misión

Para que una organización perdure en el tiempo es necesario mantener clara la misión y el lema original, recordar los objetivos previos, las raíces, los pilares iniciales en los que se rige la empresa, a pesar de tener nuevos objetivos y metas.

Incluso años después de su fundación, las organizaciones deben seguir trabajando para mejorar y optimizar los servicios ofrecidos, así como los procesos de gestión y funcionamiento de la compañía.

 

“Hacer” puede parecer simple

La clave reside en potenciar la mirada individual a través del grupo, detectando así las fortalezas individuales. Cada miembro otorgará algo único al equipo, por eso es preciso conocer las fortalezas y debilidades de cada miembro y así poder complementarse con los demás.

La organización debe reunir la experiencia y recursos de diversos empleados para realizar las tareas y funciones de la organización de una forma eficiente y exitosa. 

Esto puede parecer simple, sin embargo, la realidad es bastante compleja. Las negociaciones que tienen que realizarse en la empresa y el posterior equilibrio de intereses comunes y en competencia seguirá siendo un desafío.

 

Mirar hacia el futuro

En un mundo de cambio continuo se debe reconocer cómo las nuevas tecnologías permiten generar nuevos impactos y ampliar la vista a nuevos caminos estratégicos hacia el triunfo. Por ello, debemos tener como brújula nuestra creatividad para desarrollar nuevos caminos que permitan estar en la actualidad, resolviendo los puntos de conflicto y aprendiendo a desenvolvernos en la era digital.

 

 

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Redes sociales en la empresa: conocimiento compartido, colaboración y eficiencia

Redes sociales en la empresa (RSC): conocimiento compartido, colaboración y eficiencia

Aunque las herramientas de Redes Sociales Corporativas (RSC) son, a menudo, adoptadas por muchos líderes para que los miembros de la organización compartan conocimiento, colaboren y, así, aumente su eficiencia, muchos de estos miembros se pierden en este cambio estratégico y tecnológico debido, sobre todo, a la desconexión entre esta herramienta y los demás sistemas y tecnologías digitales que usan en su trabajo diario.

A partir de un estudio realizado por el MIT Sloan Management Review, descubrimos por qué las empresas deberían introducir una Red Social Corporativa como un componente estratégico y herramienta integrada que apoye el trabajo diario de los trabajadores y directivos.

Perdidos en la Transición Digital

Muchas compañías, atraídas por los beneficios de la digitalización de los sistemas, piden un porfolio digital que integre plataformas que van desde software para la colaboración entre el equipo hasta herramientas de gestión de proyectos y de gestión del conocimiento interno y/o intranets.

En cambio, como la mayor parte de Redes Sociales Corporativas (RSC) son herramientas basadas en la nube y están, al menos en parte, fuera del área del departamento de IT, la responsabilidad de la implementación de la RSC en el lugar de trabajo recae en líderes que no pertenecen a IT y, en muchas ocasiones, se falla en la articulación de prioridades para la navegación por este cúmulo de herramientas digitales que los empleados deben utilizar en su día a día. Es entonces cuando, debido a la falta de guía para la navegación entre las diferentes plataformas, se pierden en la transición digital.

Paradójicamente, conectar a una RSC requiere desconectar de los antiguos métodos y herramientas de comunicación y colaboración interna. Esta desconexión supone una tremenda dificultad para que los empleados utilicen las RSC. Por ello, las soluciones técnicas y culturales a este problema deben trabajar en concierto.

Las RSC como centro neurálgico del Porfolio Digital

Desde un punto de vista técnico, la empresa debería situar las RSC cómo centro neurálgico que conecte los sistemas de IT, las aplicaciones de negocio, las herramientas colaborativas y las plataformas digitales. Desde aquí, con una integración adecuada, los trabajadores y trabajadoras serán capaces de acceder a plataformas como la intranet corporativa, el correo electrónico, los directorios, las herramientas para compartir documentos, foros, blogs y/o wikis muy fácilmente y, así, se propicia la adopción de la RSC y se aumenta la eficiencia.

También se pueden utilizar Interfaces de Programación de Aplicaciones (API, por sus siglas en inglés) para integrar las RSC con las herramientas digitales preexistentes o utilizar la RSC como punto de acceso a las demás plataformas digitales del porfolio interno de la empresa para ayudar a que los empleados perciban la RSC como una herramienta más de trabajo.

Participación por parte de los Líderes y guiando en Buenas Prácticas

Desde el punto de vista cultural, los líderes deben articular unos principios flexibles que guíen a empleados y empleadas en la elección de la mejor plataforma digital para cada ocasión y elogiar aquellos usos no previstos que se alineen con las aspiraciones culturales de la organización.

También es necesaria una guía de utilización de las herramientas digitales de forma productiva para evitar la sensación de desconexión del ámbito laboral al utilizarlas. En este sentido, un manual de Buenas Prácticas es muy conveniente y un acompañamiento inicial evita posibles confusiones.

Los líderes de esta transformación e implementación de las RSC deben estar atentos a los usos imprevistos de las mismas que estén alineados con los valores de la organización y resaltarlos a través de ejemplos o historias para fomentar la utilización y la percepción de esta herramienta como un proceso y no un simple evento. A medida que la implementación avanza y madura, los miembros que resulten más activos en la RSC pueden ser una inspiración para los demás, mostrando cómo integrarla en las actividades laborales cotidianas y ayudando a navegar esta transformación digital de la mejor manera posible.

En definitiva, la organización puede aprovechar esta oportunidad de crecimiento utilizando las RSC como centro neurálgico de su transformación digital y proporcionando un mapa técnico y cultural de utilización de esta en conjunción con el resto de las herramientas digitales y abordando las posibles confusiones que se produzcan debido a su implementación.

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